La innovación educativa puede provenir de diversas fuentes y es posible distinguir varios tipos que son los siguientes:
Disruptiva. Es un tipo de innovación que pretende modificar todo el sistema educativo que debe cambiar drásticamente para adaptarse a forma en la que se enseña y se aprende.
Revolucionaria. Se trata de un tipo de innovación que no tiene precedentes, que nunca se ha aplicado y que supone un cambio importante en el proceso de enseñar y aprender.
Incrementada. En este caso se aplica la innovación sobre un sistema que ya existe, para mejorarlo.
Existen diversas formas de introducir la innovación educativa en el aula, todas ellas encaminadas a lograr que las experiencias de aprendizaje de los estudiantes sean significativas. En lo particular el aula invertida o flipped classroom, el aprendizaje colaborativo, el aprendizaje basado en proyectos y la realidad virtual aumentada considero son pasos concretos que permiten el logro de los indicadores de logro y desarrollo de competencias.
La innovación educativa, por lo tanto, es una forma más de conseguir una educación de calidad.